Desde siempre se ha sabido la necesidad que tiene el ser humano de comunicarse con los otros de su misma especie. Incluso ha tratado de deducir el lenguaje de algunos animales. Todo esto con el fin de comprender lo que nos quieren transmitir y a su vez darnos a entender.
Es así como logró establecer ciertos códigos de interacción para representar lo que quería expresar. De esta forma, se dio origen a la comunicación oral y escrita. Se pusieron de acuerdo para el significado de palabras, gestos, signos, etc. Pero no se conformaron con ello, ahora se posicionan conceptos como la globalización, expansión y movilidad.
La comunicación del hombre a las máquinas
La meta de romper barreras en cuanto límites geográficos o de tiempo, tienen su camino en el mundo virtual, en lo intangible. Todo comenzó con la invención del teléfono, un medio que permitió que personas se comunicaran directamente sin estar presentes en el mismo lugar. Pero como era de esperarse, ese aparató no se quedó hasta allí.
Seguían existiendo ataduras, múltiples restricciones que se fueron superando con el tiempo hasta llegar a los actuales teléfonos móviles, llamados incluso “inteligentes”, pero cómo un aparato puede poseer esa cualidad, presuntamente de exclusividad humana? Y la respuesta está en la incorporación de programas y aplicaciones que les dan un poder superior a cualquier aparato inerte.
La creación de códigos de entendimiento no solo se elaboró para la interacción de seres humanos con su habla o escritura. Se desarrolló un lenguaje para que las máquinas se “hablaran”, pudieran recibir instrucciones y responder satisfactoriamente a ellas. La base para hacer realidad ese comportamiento se debe a lo que conocemos como sistemas operativos.
Los sistemas operativos son una especie de intérpretes entre el ser humano y la máquina, hacer que esta última satisfaga deseos y necesidades del primero. En un principio fue implementado en ordenadores, y afortunadamente llegó a los equipos de comunicación, a los teléfonos. Siendo Android uno de los más versátiles y pragmáticos en la actualidad.
Los móviles Android, entonces, son esos aparatos tan maravillosos que ostentamos hoy día, que nos ofrecen un sinfín de facilidades.Tal vez sean incontables las App desarrolladas para una u otra finalidad. El comercio actual ha adoptado el uso de estas plataformas y, por ende, ya ni siquiera es necesario salir para comprar o vender.
Todo aquel que quiera subsistir en la época moderna, y más aún, permanecer en la era futurística que se vislumbra, ha de aceptar e incorporar la tecnología a sus procesos y hasta en sus hábitos.
