En Clash Royale, es importante conocer las cualidades defensivas de ciertas unidades en casos muy precisos. Contra los grandes ataques, se aconseja utilizar al caballero, al príncipe, o al mosquetero, que son buenos defensores de un objetivo.
Contra las unidades aéreas conviene recurrir a los mosqueteros, a los brujos, a las gárgolas así como a los arqueros, o a los excelentes gobelinos de lanza, menos potentes pero más baratos. Para poder jugar basta con descargar hack clash royale.

Autor: natureaddict-Pixabay
El Elixir es la fuente principal del juego, sirve para lanzar nuevas unidades al campo de batalla. Por cada segundo que pasa, aumenta a la misma velocidad en los dos jugadores. En el terreno, la diferencia reside en la forma en que se utiliza ese Elixir.
El jugador que gana es el que mejor haya utilizado esta fuente, es decir, aquel que haya colocado las unidades correctas en los mejores lugares para resolver de forma óptima los problemas tácticos planteados por el adversario, al tiempo que le crea otros. El objetivo final: romper el equilibrio de las fuerzas para crear avances destructivos hacia sus torres.
La mejor defensa
Si hay que defender una torre, se pueden colocar los DPS a distancia, detrás del edificio, tales como el bombardero, los gobelinos de lanza, los arqueros o el brujo, desde donde podrán atacar al enemigo sin verse tocados.
La distracción del enemigo es una técnica de defensa vital en Clash Royale. Cuando una unidad franquea el puente y que no se tiene bastante elixir para enfrentarse a un ejército, la mejor opción consiste en ponerle una carta Cañón que se debe colocar en medio del mapa, o lanzar una pequeña carta de tipo esqueletos gobelinos, o un ejército de esqueletos en caso de gran ataque.
Liberar la Torre
La maniobra tiene por efecto sacar al enemigo de la Torre, que puede entonces alinearse tranquilamente mientras que los edificios y otras unidades sacrificables lo colocan a buena distancia. Gracias a este plazo, se puede tomar el tiempo necesario para lanzar una carta importante, más eficaz para contrarrestar la ofensiva del adversario. Conviene precisar que los gigantes, los caballeros de cerdos, y los golems, que atacan únicamente los edificios, no se pueden distraer por las unidades. Para distraerlos de las torres, hay que colocar un cuartel o un edificio de defensa.
En caso de gran ataque, existe una medida popular para distraer, no sólo a las unidades, sino al propio jugador contrincante. Consiste en lanzar a un príncipe del lado opuesto al asalto para obligar al atacante a escoger entre continuar con el ataque o invertir en una defensa. Si escoge la segunda opción, se habrá ganado la partida, además de un tiempo precioso para reforzar la línea defensiva.